Una señal de radio del espacio puede provenir de extraterrestres tratando de comunicarse con los humanos

Desde hace un buen tiempo atrás los científicos han recibido unas señales de radio que parecen estar ocurriendo con mucha mas frecuencia que antes. Desde el primer momento en que esta señal fue recibida los expertos han estado investigando este fenómeno desconocido que muchos describen como "rápidos estallidos de radio" que son muy breves pero intensos impulsos de ondas de radio que provienen del espacio exterior.

A pesar de que todavía no se sabe con seguridad y certeza de donde es que provienen estas ondas de radio, los mismo profesionales en el área científica han especulado que quizás estas señales provienen de civilizaciones extraterrestres que viven a una gran distancia. De hecho, los astrónomos están tan perplejos por este fenómeno que está impulsando un renacimiento en  la investigación de la radioastronomía.

Las buenas noticias es que a pesar de que no se saben quien esta tratando de comunicarse con el planeta tierra, los científicos ahora son capaces de señalar de donde estas ráfagas de radio provienen. La ultima señal de radio fue la mas rápida y brillante la cual fue nombrada como la señal FRB 150807 que después de su fecha de descubrimiento, ha dejado una impresión increíble en los investigadores y esto les permitió a descubrir la razón por la cual esta ráfaga ocurrió en el primer lugar, cosa que no había ocurrido con las anteriores señales recibidas que fueron muy difíciles de identificar.

Gracias a la señal FRB 150807 se concluyó que la explosión que ocurrió en Agosto del año 2015 probablemente se originó en una galaxia conocida como VHS7. Esta galaxia se encuentra entre 3,2 y 6,5 millones de años luz de distancia, lo que significa que no sabemos exactamente lo que se encuentra o quien vive en esa galaxia lejana. 

La primera explosión de radio, conocida como la explosión de Lorimer, fue descubierta por accidente a través del telescopio Parkes en Australia, cuando astrónomos buscaban emisiones de radio pulsadas por las estrellas de neutrones que giraban, pero en cambio descubrieron esta señal de radio. 

Después de ese primer descubrimiento por accidente, varias muchas más señales han sido detectadas por telescopios en todo el mundo. Desde entonces, sus orígenes han sido debatidos en todo el campo de la astronomía. Algunos creen que estas ráfagas cósmicas son núcleos colapsados ​​de estrellas o agujeros negros que chocan entre sí. Sin embargo, muchos piensan que la respuesta podría estar en algo aún mucho más misterioso, como civilizaciones alienígenas que intentan alertarnos de su existencia.

Ha sido difícil para los astrónomos rastrear su origen, sobre todo debido al hecho de que creen que vienen de una galaxia muy lejana y que los telescopios que poseemos actualmente simplemente no son lo suficientemente potentes para ver esa parte del espacio.

Lo mas extraño de este fenómeno es que también parecen ocurrir sin patrón alguno, por lo que es muy difícil adivinar cuándo van a ocurrir y siempre pasa de un momento a otro sin esperar. 

Los estudios demuestran que este fenómeno no es realmente tan raro como los astrónomos piensan, ya que pueden haber hasta 190 de estas ráfagas de radio por día. Pero el mayor desafió es saber como mapearlos y localizar sus orígenes para descubrir qué es exactamente lo que está causando estos destellos.


Y puesto que no sabemos exactamente lo que está más allá de nuestro sistema solar, o lo que hay en este mismo, una civilización extraterrestre que intente tener contacto con nosotros suena como las mas posible y probable explicación.